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Nada como ejercitarse al aire libre

Hacer ejercicio es una actividad altamente recomendable, la posibilidad de realizarlo al aire libre ofrece ventajas y beneficios más allá de los conocidos. El movimiento del cuerpo, estimulando los sentidos con los colores, los ruidos de la naturaleza, la sensación del aire sobre la piel y las mismas percepciones del aire limpio son beneficiosos para el estado físico y la mente.

Si bien, hacer ejercicio es una actividad altamente recomendable, la posibilidad de realizarlo al aire libre ofrece ventajas y beneficios más allá de los conocidos. 

En un estudio elaborado por la Universidad de Essex (Reino Unido) quedó demostrado que el ejercicio al aire libre favorece de manera significativa al ánimo y mejora la autoestima en comparación con el que es practicado en espacios cerrados.

En dicha investigación se plantea que durante los primeros cinco minutos de ejercicio, al aire libre y sin distinción de la actividad que se lleve a cabo, hay un impacto positivo sobre el cuerpo.

El argumento sostiene que el movimiento del cuerpo, estimulando los sentidos con los colores, los ruidos de la naturaleza, la sensación del aire sobre la piel y las mismas percepciones del aire limpio son beneficiosos para el estado físico y la mente.

Por otra parte, hay investigaciones que han confirmado que la actividad al aire libre multiplica las ventajas que la luz solar tiene sobre el organismo, como la activación de la vitamina D (favorece la mineralización de los huesos).

La producción de endorfinas (también llamadas las hormonas de la felicidad) es mayor cuando se hace deporte al aire libre. Además, estimula la propiocepción y favorece la coordinación y el equilibrio, opina Olga Lucía Estrada, médica fisiatra experta en ejercicio. 

 

5+ ventajas de ejercitarse al aire libre

  1. Pérdida de peso. Si esto es una meta, una manera efectiva para ver resultados en un tiempo determinado es alternar el gimnasio con ejercicios al aire libre. Al combinar las rutinas, existe menor oportunidad de que el cuerpo se estanque en un determinado peso. Al mantener los músculos alertas con ejercicios cambiantes, estará activo el metabolismo, lo que lleva a una mayor pérdida de peso.
  2. Menor sensación de fatiga. Probablemente, después de concluir una rutina, la sensación de fatiga es frecuente. Sucede por varios factores: la carencia de alimentos energéticos o problemas personales, entre otros. Al realizar ejercicios al aire libre, esas condiciones serán resueltas, ya que una zona verde provee al sistema nervioso de diversos estímulos agradables que sirven de distracción y reducen la conciencia sobre las sensaciones fisiológicas o emociones negativas.
  3. Cambiar de ambiente. A pesar de acudir al gimnasio, es recomendable que se rompa esa rutina para conservar la motivación. Una sugerencia es dedicar una o dos semanas a la práctica de ejercicios al aire libre. Los espacios abiertos proporcionan diferentes opciones de actividades, disminuye el aburrimiento y se convierte en un estímulo para continuar un estilo de vida saludable.
  4. Reduce el estrés. Una clave para estar saludable es respirar aire fresco y, combinado con ejercicio, hace maravillas para reducir estrés. La adrenalina, noradrenalina y cortisol (marcadores endocrinos relacionados con el estrés), caen después de estar en contacto con la naturaleza.
  5. Diversión para grupos. Realizar ejercicios rodeados de gente ayuda a establecer relaciones sociales y promueve una comunicación más fluida. Además, las hormonas de la felicidad (endorfinas) se generan haciendo ejercicios al aire libre en mayor cantidad que en un espacio cerrado. 

Cualquier actividad que genere movimiento al aire libre, por treinta minutos, mínimo tres veces a la semana, trae grandes beneficios.

+ ventajas

Impacto en el peso. La variedad de ejercicios, la posibilidad de estimular más partes del cuerpo, la sensación de libertad y una mayor tendencia a ser constantes, favorecen la disminución del peso.

Variedad. En espacio abierto puede haber diferentes opciones de ejercicio, lo que favorece el interés, disminuye el aburrimiento y se convierte en un estímulo para que la gente no desista en ejercitarse.

Emociones. Los estímulos permanentes y el contacto con el aire liberan de tensiones emocionales y disminuyen el estrés de la persona. Al estar alerta en la actividad y en el entorno hay mayores enfoques y se cualifica más la capacidad de alerta.

Diversión. Ejercitarse en espacios abiertos suele relacionarse al entretenimiento y no a la obligación. La interacción con personas provoca mantener rutinas, competir sanamente y lograr de objetivos.

La clave está en ser constantes, pues está demostrado que cualquier actividad que genere movimiento al aire libre, por treinta minutos, mínimo tres veces a la semana, trae grandes beneficios.

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